William, it was really nothing

Ataques de espasmo, conciertos intimistas, años ochenta, voz en nota Re, walkmans, la luz que nunca se apaga, una poesía que gira sobre el amor, Morrissey, ambiguedad, Marr, melancolía. Todo eso y mucho más es The Smiths para mí. Si tuviera que escoger un sombrero para escuchar The Smiths, elegiría un sombrero blanco alto con doblez en la copa por la mitad. Se trataría de un sombrero infame con bordes descosidos y forma muy bien cuidada. Es que The Smiths se transformó en eso en el poco tiempo que llevo escuchando su música. Se convirtieron en un grupo totalmente prolijo y limpio en lo esencialmente simbolista y denso en el disfuerzo de sus guitarras. Hay que oírlos un poco más.

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Comentarios

David Delio dijo…
Es increible que en latinoamerica sean tan poco conocidos, aunque yo vengo escuchandolos desde el 92 primero conoci a Morrissey cuando saco Your Arsenal, y de Moz llegue a The Smiths y creo que fue amor a primera vista no me pude separar de ellos son fabulosos, te recomiendo Louder Than Bombs que es un recopilatorio de 25 buenos tracks y luego Singles que salio en el 95 con Diana Dors en la portada.

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